Venezuela
Actualizado: 3 may 2019
Por: Martin Villalobos, 11º
Aquel 2 de diciembre de 2007, cuando el ex-presidente venezolano Hugo Chávez, pasó un referendo, con el objetivo de conformar al país como un Estado Socialista, y que fue rechazado por el pueblo venezolano, empezó la preocupación del pueblo, alarmados por el futuro de su bello país. Para que luego, un año después, el presidente de aquel entonces, el mismo, Hugo Chávez, logró pasar la enmienda #1, para abolir los límites a los periodos en el cargo de presidente, gobernadores estatales, alcaldes y otros. Luego de cinco años, fallece el gran Hugo Chávez, el fiel compañero de Chávez gana las elecciones y pasa al mando del poder ejecutivo.
En el 2014, empezaron las protestas populares, líderes sociales y políticos, se ven involucrados en enfrentamientos, entre ellos Leopoldo López, que pasó tres años encarcelado bajo la orden el mismo Nicolás Maduro, quien no lo liberó hasta el 2017 cuando le dio la sentencia final de casa por cárcel. La situación se termina de desmoronar en el 2015, grandes empresas surtidoras internacionales se retiraron del país, por lo cual toda la sociedad se vio afectada, enfrentando la escasez de productos en los puntos de venta en todo el territorio nacional. Nicolás Maduro no supo tomar las riendas del país y el precio del petróleo se devaluó de una manera extraordinaria, el país entra en crisis. El pueblo exige la renuncia de su presidente. Repentinamente, en enero del 2018 casi 15 días después de la posesión del segundo mandato de Maduro, el presidente de la Asamblea Nacional Venezolana, Juan Guaidó, tomó juramento, con el respaldo de gran parte de la población y de los partidos políticos venezolanos para convertirse en el presidente interino de Venezuela y tomar control del poder ejecutivo, hasta que se realicen elecciones democráticas libres.
Y el mundo está reaccionando, al día siguiente de que Guaidó se reconoció como presidente interino, países como Estados Unidos de América, Colombia, Brasil, Argentina, Paraguay, Guatemala y la Unión Europea entre otros, reconocieron a Guaidó, como la persona al mando de Venezuela, asegurando que respaldan totalmente el golpe de Estado al gobierno del actual Nicolás Maduro. A raíz de esto, tres días después de la proclamación de Juan Guaidó como presidente interino, y luego de que varios países lo hubieran reconocido, Perú, República Dominicana y los Estados Unidos, llamaron a una reunión de emergencia del consejo de seguridad de la ONU, el órgano de mayor nivel en las Naciones Unidas, a cargo de intervenir en las situaciones que puedan afectar a la paz mundial. En dicha reunión, diferentes naciones dieron sus posiciones con respecto a Venezuela, lo que se debería hacer e incluso cuáles son los puntos críticos de la situación. Inclusive, grandes países como Alemania, y Francia plantearon ante el consejo el ultimátum que consiste en que si el gobierno venezolano no cede al pedido de realizar elecciones democráticas, dichos países no reconocerán más a Maduro, y pasarán a reconocer a Guaidó como el presidente de Venezuela. Por el otro lado, países como Rusia, defienden al gobierno de Maduro a como dé lugar, esto debido a la estrecha relación entre ambos países. Así mismo, el representante de Venezuela sobresalió en el debate por defender al gobierno de Maduro basándose en la ilegitimidad de la posesión de Guaidó para la constitución venezolana y en la ilegitimidad de cualquier intervención o acto internacional que viole la soberanía nacional venezolana establecida en La Carta Magna de las Naciones Unidas, pero sobre todo, habló de la gran influencia americana en el golpe de Estado al gobierno de Maduro, acusando a Estados Unidos de estar detrás de dicho golpe, como si fuera un complot planeado por los Estados Unidos junto con Colombia, Brasil y otros aliados americanos.
Los gobiernos democráticos en el mundo esperan con ansias que Venezuela recupere su estructura política, que se pueda estabilizar y que termine su crisis interna relacionada con falta de bienes básicos para los venezolanos.
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